PEPE RODRÍGUEZ/VALENCIA Paso adelante y las puertas del cielo se abren de par en par. Los más de 3.000 espectadores que acudieron al San Gregorio ya se frotan las manos. Y no es para menos. La solidez que muestra este Huracán invita al optimismo y hace presagiar que a la tercera será la vencida. Lucena y Jaén ya son agua pasada. Ayer, no sin sufrimiento, la escuadra de Toni Seligrat demostró ser un equipo con hechuras y que se desenvuelve a las mil maravillas en este tipo de eliminatorias donde la experiencia es un grado. Golpeó en el momento más oportuno, supo atajar los arreones alcarreños y dio la estocada final con el tiempo cumplido.

Como si de una partida de ajedrez se tratara comenzó la contienda. Mucho era lo que había en juego y las papeletas de adquirir pasaporte a la ronda definitiva pasaban en buena parte por marcar primero. Y eso es lo que hizo Huracán. Un saque de banda terminó con una prolongación con la testa de Javi Navarro y, tras un semifallo en el punto de penalti, el cuero le quedó a Peris, que no se lo pensó para soltar un disparo cruzado que besó las redes de Kevin desatando la locura. El madrugador tanto tranquilizó a los anfitriones, que tiraron de veteranía con un Pablo Vidal que se hizo amo y señor de la medular. No se sentía cómodo el Guadalajara en medio del diluvio y del sistema infranqueable que planteó Seligrat. Unas líneas muy juntas y rápidas llegadas con 3-4 pases eran la receta ideal para asestar la estocada final. Un cabezazo de Javi Navarro se marchó fuera tras un centro desde la derecha, mientras que Peris lo volvió a intentar.

A vuelta de vestuarios, el Guadalajara era consciente de que debía dar un paso adelante. No le valía el resultado. Huracán, con el viento a favor, se ha visto en situaciones similares saliendo airoso. Esta vez no iba a ser menos. Javi López emergió como el jugador más incisivo del cuadro morado y de sus botas salió el mayor peligro. Un remate de Rangel también puso a prueba a Paco. El Guadalajara apretaba de lo lindo y tocaba sacar fuerzas de flaqueza. Vaciarse hasta la extenuación. Tanto esfuerzo iba a valer la pena. Tomás Ruso y Amarilla tuvieron que multiplicarse para desbaratar las embestidas del conjunto de Salvachúa, que puso el miedo en la garganta con un testarazo alto de Rangel. El final feliz llegó en el descuento tras un pase largo y un primer remate de Tariq se se estrelló en el cuerpo Kevin. El rechace, con la defensa del Guadalajara rota, lo cogió Luismi Loro para rematar con un tiro centrado al fondo de la portería y colocar el definitivo 2-0.

Jugadores, cuerpo técnico y aficionados radiaban de felicidad. El acceso a la tercera eliminatoria se había convertido en una realidad. Huracán estará mañana en el bombo, donde le espera un hueso duro de roer. Pero la palabra miedo no existe en el diccionario. El fútbol le debe una a Huracán y el convencimiento de que a la tercera será la vencida es total.

FICHA TÉCNICA

Huracán: Paco; José Ruiz, Tomás Ruso, Amarilla, Gomis; Javi Boix (Julià, 76'), Pablo Vidal, Fali, Peris (Luismi Loro, 88'); Jesús Rubio y Javi Navarro (Tariq, 62')

CD Guadalajara: Kevin; Moyano ( Kevin Lacruz, 62'), Dani Gómez, Rangel, Gonzalo Verdú, Chema Mato (Borja Yebra, 70'), Javi López, Pérez, Edgar, Molinero y Arroyo ( Manzano, 70')

Goles: 1-0, m.9: Peris; 2-0, m.93: Luismi Loro.

Árbitro: Pérez Peraza. Amonestó a los locales Luismi Loro, Javi Navarro y Paco; y a los visitantes Chema Mato y Rangel. Expulsó al local Pablo Vida por doble amonestación en el minuto 51.

Estadio: San Gregorio, ante 3.000 espectadores.