lunes 07 octubre 2024
Rus debe decidir, política o fútbol 08/04/2014
SERGIO IZQUIERDO/GOLSPORT MEDIA Por si el proceso de venta del Valencia CF no estaba ya bastante enmarañado con ofertas de dudosa credibilidad, lios entre Bankia y el club, retrasos y vaya usted a saber que más, ahora el Gobierno Valenciano, que es parte implicada pero cuya presencia debería ser prácticamente testimonial, podría darle otra vuelta de tuerca al proceso, gracias a las polémicas declaraciones del presidente de la Diputación de Valencia Alfonso Rus, en las que aseveró que desde Jaume I ningún moro ha gobernado en Valencia, en clara alusión a la oferta anglo-árabe que se retiro ayer de la carrera por hacerse con la propiedad de la entidad valencianista.
No es ninguna novedad la devoción que siente el Sr. Rus por el fútbol y el Valencia CF, siendo uno de sus sueños el convertirse algún día en presidente del club de Mestalla. Hasta aquí todo podría considerarse normal, es decir, no deja ser una ilusión, como la puede tener cualquiera, de ver cumplido uno de los sueños de su vida, pero lo que no ha sentado nada bien en el seno del Gobierno Valenciano han sido las formas que ha adoptado el Presidente de la Diputación de cara al público. El pasado viernes, en la convención Intermunicipal del partido en el que ejerce sus funciones, durante su presentación manifestó, «Soy alcalde, presidente de Diputación, del partido y de aquí poco, del Valencia». Estas declaraciones tuvieron una reacción inmediata por parte del Presidente de la Generalitat, que vino a expresar que lo primero son los ciudadanos y centrarse en mejorar la Comunitat Valenciana. «Yo tengo poco tiempo para hacer cosas que no sean estar al frente de la Comunitat Valenciana porque hay muchos temas que todavía quedan por resolver. Creo que debemos centrarnos en la responsabilidad que los ciudadanos nos han dado».
Como informó el diario LEVANTE-EMV, según palabras del mismo Rus dijo, "yo voy con dos ofertas, los americanos y los rusos, la guerra fría esa". Al presidente de la Diputación se le ha vinculado especialmente con la oferta que llega desde Rusia y que tiene como principal acreedor al multimillonario Kusnirovich. La propuesta eslava, que estaría dispuesta a invertir cerca de 600 millones de euros para adquirir el Valencia CF, podría situar en el sillón presidencial al político de Játiva que tendría en sus futuros planes compaginar la presidencia de la Diputación, del Partido Popular, alcaldía de Xàtiva y su candidatura como diputado hasta 2015. Únicamente abandonaría la presidencia del Olímpic, equipo de Segunda B, por incompatibilidad.
Este es el principal problema para el Gobierno Valenciano, que vería como su discurso de que el Valencia CF y la política deben estar completamente desvínculados quedaría en totálmente en entredicho.
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