PEPE RODRÍGUEZ / GOLSPORTMEDIA Hablar de Rafa Puchol son palabras mayores. Su trayectoria en el mundo del balompié da para mucho. Ahora, el exjugador ha iniciado un reto apasionante: el de sentarse en el banquillo del Burjassot. Su club de toda la vida. La exigencia del ascenso a Preferente la acepta con naturalidad y asume la responsabilidad. El inicio de campeonato en Primera Regional no ha podido ser más prometedor.

Puchol, con el nivel 2 de entrenador, conoce la casa y se muestra encantado con la plantilla que tiene. “Somos un bloque y lo demostramos”, afirma. Los números no engañan: son de ascenso. Los gualdivioletas acumulan siete victorias y un empate en siete jornadas. Solo les aguanta el ritmo el CD Serranos. Un inicio espectácular, aunque recuerda que “el campeonato es largo y se debe ir paso a paso”. El partido contra el San Antonio de Benagéber terminó con 2-1 para los guadivioleta. Un resultado que debió ser más amplio.

El 'Burja' no está para muchos trotes económicamente hablando, pero Puchol ha unido y sacado lo mejor de un grupo de futbolistas ilusionados y ambiciosos. Rafa está sacando lo mejor de cada uno. Una plantilla formada mayoritariamente por jugadores procedentes de otros clubes de Primera Regional y tres futbolistas del juvenil. Nada de tirar de talonario para fichar a 'cracks' de Preferente. La fórmula está funcionando a las mil maravillas. Además, Puchol ha enganchado a la afición. Prueba de ello es que en los partidos del Amateur las gradas de Los Silos muestran su mejor cara.

Puchol es especial para el Decano y su público. El debutante entrenador militó siete temporadas defendiendo la elástica gualdivioleta. Seis de ellas fueron jugando en Tercera División, con más de 150 goles a sus espaldas. Además, tuvo un periplo glorioso en el Catarroja (disputó una promoción de ascenso a Segunda B) y también dejó huella en el Puçol. ¿Gran jugador y mejor entrenador?.