VÍCTOR BOLÓS / GOLSPORT MEDIA Ya me lo dijo mi amigo Amadeo Carboni: “Víctor, nos vamos a cansar de ver pasar jugadores por el Valencia CF y lo vamos a pasar muy mal los que de verdad amamos este club". Unas palabra que escuché hace más de un año cuando Amadeo Salvo hizo todo lo posible para que Peter Lim y su empresa Meriton se hiciera con los mandos de la nave blanquinegra.

Lo de Peter Lim es de ver para creer. Un señor con un patrimonio de más de 3.000 millones de euros. Dueño de uno de los clubes con más potencial del planeta fútbol si lo controla un buen equipo de profesionales. Algo que, por desgracia, no está sucediendo desde el pasado 1 de Diciembre de 2015 cuando el singapuriense pasara a ser el dueño del Valencia CF. Lim no solo me ha sorprendido por intentar manejar con mando a distancia un súper club como el Valencia CF, en el que resulta muy importante permanecer en continuo contacto con su afición y en general con la sociedad valenciana. El magnate debe saber mucho de números, pero me está demostrando que sabe muy poco de fútbol por sus movimientos hasta la actualidad. Su tarjeta de visita solo ha consistido en acudir a presentarse al valencianismo como una estrella de rock.

Lim tiene todo lo necesario a su alcance para llevar al club de Mestalla a competir con los mejores clubes del mundo. Pero su ignorancia en el mundo del balompié está haciendo que el mejor equipo del mundo en el 2004 esté dando una imagen penosa por toda Europa. Peter cayó en las redes de Mendes, que ya llevaba más de dos años con la idea de hacerse con las riendas de un club de primer nivel desde la sombra. El agente de Cristiano Ronaldo le supo vender la moto para que el singapuriense se hiciera con los mandos del Valencia. De esta manera, el representante lo está utilizando como escaparate en Europa para dar a conocer sus jugadores representados y venderlos cuando estén por encima de los 40 millones.

Al señor Lim le urge reaccionar después de vivido en Valencia durante el primer año, en el cual se fichó por un largo plazo a un entrenador que todavía no tiene ni columna vertebral en su equipo, ni sistema que sepan los jugadores. Además, Nuno no sabe reaccionar cuando el equipo sufre una adversidad como la de jugar con un marcador en contra. El magnate se ha gastado 200 millones de euros en unos jugadores de medio pelo en solo un año y, por lo que se está viendo en el campo, que vaya preparando lo mismo para el siguiente curso. Más le hubiera valido cuando llegó firmar a dos jugadores por 400 millones de euros como Lewandosky y Neymar. Dos estrellas que, junto a la base del plantel que ya había y trabajando bien la cantera, bastarían para levantar títulos.

El señor Lim empezó muy mal invitando a salir a Salvo y Rufete para meter en el club solo a personas de su confianza y sin ideas de fútbol. Posiblemente, muy pronto conozca el ruido de la afición de Mestalla si es que no lo sabe ya. Los valencianistas somos muy fuertes cuando nos unimos y muy cariñosos cuando nos tratan con mimo, pero capaces de tumbar a cualquiera que juegue con la ilusión y desprecie... aunque este se llame Peter Lim.