Héctor de la Vega. Si esperamos a que el equipo se quede atrás y juguemos a empatar los partidos mal vamos, mal estaríamos juzgando nuestras limitaciones tanto en ataque como en defensa. El equipo necesita sentirse equipo, y siendo el farolillo rojo de la clasificación no hay que especular en los partidos, porque eso, es el primer paso hacia el descenso. Otra cosa que si que no entenderé la obsesión que tiene Rubi con Ghilas, futbolista que todos los aficionados ven arrastrarse por el terreno de juego sin aportar nada al juego, y lo peor es que el entrenador sigue y sigue creyendo en el.

Hoy también me gustaría ponerme en la piel de Vicente Iborra, jugar contra el equipo de tu corazón, que lo estás viendo sufrir, lo estás viendo que se acerca a la segunda división y tuyas sean las acciones en las que el Sevilla a conseguido marcar, debe ser duro.

En definitiva es que, todos sabíamos hasta donde íbamos a llegar tanto con el Sevilla como el próximo partido contra el FC Barcelona, equipo líder y que está compitiendo de una manera perfecta, y al que, “robarle” puntos está en un pico muy alejado. También advierto que la frase Esta no es mi liga no me vale para nada ya que hay que salir a ganar todos los partidos, sea quien sea. Así que mí reflexión es, luchemos todo lo que nos queda con la fuerza y el corazón que merece este escudo y que el destino dirija hacia donde debemos ir.