Nadie se acerca a las estadísticas de un Burjassot que ha pasado prácticamente de puntillas por la Primera Regional. En Los Silos se preparan para ratificar el ascenso al tiempo que Puchol, el técnico, apela a la prudencia en un deseo de mantener la tensión competitiva y poder acabar la Liga sin derrotas. Un hecho que sería histórico, tanto para el club como para su currículum como entrenador. Los números son como el algodón: no engañan. Los gualdimorados solo se han dejado 4 puntos de 72 posibles y 'barren' al resto de líderes de Primera Regional. Solo el Castellonense le aguanta en el viaje de la imbatibilidad.

Los 68 puntos producto de 22 victorias y dos empates (70 goles a favor y 17 en contra) son unas cifras de otra galaxia e inalcanzables para cualquier otro líder de la categoría. Ibarsos 54 (cuatro derrotas), Nules 59 (una derrota), Rayo Benageber 55 (tres derrotas), Massanassa 59 (tres derrotas) y Redován 55 (tres derrotas) se encuentran lejos de los registros que marca el Decano. Por puntuación y por saber ya lo que significa un traspié. Solo el Castellonense se mantiene invicto también en lo más alto del grupo VII de la Primera Regional. 17 victorias, 7 empates y ninguna derrota, pero diez puntos menos producto de tanta 'equis'.

Por otro lado, la calculadora del ascenso ya echa humo. El vestuario se prepara a conciencia para ganar en el campo del Walter Alaquás. Una victoria en El Terç aumentaría las opciones de cantar el alirón ante la afición en el encuentro del próximo 9 de abril contra el Meliana. En esa misma jornada, la 26, el CD Serranos afronta una salida durísima a la cancha de un Mislata UF que apurará sus opciones de promoción. Un pinchazo del segundo clasificado en La Canaleta (se da por hecho que el próximo fin de semana ganará al Massamagrell) unido a los triunfos del líder en Alaquás y ante el Meliana significaría el ascenso matemático.