PEPE RODRÍGUEZ/GOLSPORT.ES La escuela del Alboraya fue protagonista con su puesta en escena. El día esperado se desarrolló acorde a la normalidad y dentro de un clima en el que futbolistas y cuerpo técnico de los diferentes equipos tuvieron su punto de protagonismo. Especialmente el Juvenil A después del ascenso a División de Honor Juvenil conseguido hace unos meses.

Los 35 equipos que componen la UD rojilla, 17 de fútbol-11 y 18 de fútbol-8, salieron al terreno de juego delante de los espectadores presentes. La puesta de largo sirvió para rendir tributo a los componentes del Juvenil A por su ascenso a División de Honor. Al acto acudieron un buen puñado de personalidades del fútbol regional y también representación política. El colofón final fue el partido amistoso que disputó el Juvenil A frente al Valencia Mestalla. En el encuentro participaron los cinco jugadores del Amateur que el pasado curso formaron parte del exitoso plantel del Juvenil A. José Vicente Hurtado, máximo representante de la parcela deportiva, afirmó que "se ha trabajado duro para recomponerse". "Cada temporada se marchan muchos jugadores. Por ejemplo, el Valencia se ha llevado doce este año y ante eso cuesta rehacerse", indicó. No obstante, para Hurtado las esperanzas por hacer una gran temporada a nivel de escuela son grandes. "Vamos a seguir reforzando el trabajo de cantera y también competiremos. Tenemos claros cuales son nuestros valores y nuestra filosofía", añadió. Hurtado, en relación a la andadura del Juvenil A en División de Honor, espera que el equipo "saque la cabeza lo más pronto posible". También dejó claro que el ascenso del Amateur a Regional Preferente no es una prioridad. "No renunciamos a nada, pero no lo tenemos como uno de los objetivos", concluyó.

Por otro lado, el club anunció un acuerdo de colaboración con GM Football Academy. La intención no es otra que la de mejorar la formación de los entrenadores de la escuela y la de ayudar a los chavales a dar un impulso. Dicha entidad cuenta con 30 equipos y nutre de contínuo a selecciones de países como Marruecos o Australia. Algo que supone un escaparate perfecto. Una posibilidad real de que jugadores del Alboraya den el salto a clubes extranjeros.