lunes 07 octubre 2024
Bankia se porta "bien" con el Valencia y la concede un mes de prorroga del préstamo de 220 millones 26/03/2014
SERGIO IZQUIERDO/GOLSPORT MEDIA En el día de ayer a todo el valencianismo se le puso el corazón en un puño cuando se publicó que el Valencia CF podría haber solicitado la documentación para presentar un preconcurso de acreedores. La noticia al final quedó en papel mojado cuando Bankia anunció a última hora de la tarde que concedía un mes de prórroga por el crédito de 220 millones. Así pués, la maniobra de Amadeo Salvo por evitar que la UEFA pudiera sancionar al club con no disputar competicones europeas durante dos temporadas, quedó abortada.
El crédito de 220 millones que tiene el club de Mestalla con la entidad bancaria vence mañana día 27 de marzo y Salvo asesorado por un círculo de personas cercanas a su entorno, entre los que se encuentra el presidente del Valencia Basket, Vicente Solá, consideraron la posibilidad de solicitar el preconcurso de acreedores como una posibilidad muy a tener en cuenta para ganar tiempo e intentar que el máximo órgano europeo le dejara apartado de la competiciones europeas.
Como reconoció Salvo en el programa Sillas Gol, esta maniobra se inició tras el ultimátum de Bankia de reclamar el préstamo de 220 millones antes del 1 de abril, día que la entidad valencianista debe informar del estado de sus cuentas a la UEFA, y no violar las normas del "fair play" financiero impuesto en las últimas temporadas. En caso de que el Valencia no hubiera obtenido la prórroga, habría incurrido en un préstamo impagado, circunstancia que podría suponer una sancíon por parte de la UEFA que le impediría disputar competiciones europeas durante dos temporadas.
Bankia, por su parte, confirmó que no tiene ninguna intención de realizar cualquier tipo de movimiento que pueda perjudicar al proceso de venta y que una vez se conozca al próximo propietario del Valencia, negociará cualquier condición financiera, prórroga o refinanción de créditos.
Precedentes
El Mallorca ya sufrío las consecuencias de no cumplir el "fair play" de la UEFA. El conjunto balear que en la temporada 2010 se clasificó para la Europa League, no pudo disputar competición europea al entar inmerso en un concurso voluntario de acreedores, con una deuda de cerca de 70 millones de euros.
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